GUSBORAL

Hoy llevé a mi cachorro Cooper a Gusboral con una indicación muy clara: que NO LE CORTARAN LAS UÑAS, ya que había leído en reseñas anteriores que habían hecho daño a otros perros. A pesar de eso, le cortaron las uñas igualmente y le hicieron sangre en prácticamente todas. Tengo fotos de cómo me manchó la ropa de sangre por el dolor que le causaron. Sé que se disculparon y no me cobraron, pero sinceramente, me parece inaceptable que se ignore una instrucción tan específica y delicada. Lo mínimo que uno espera es que se respeten las decisiones del propietario, especialmente cuando se trata de la salud y el bienestar del animal. Me entristece mucho lo que ha pasado, y por supuesto, no volveré a traer a mi perro ni recomendaré este lugar. Espero que tomen medidas reales para que esto no le vuelva a ocurrir a ningún otro perro.

We were travelling from Dublin and decided to pop Bailey (our toy Pomeranian) in for a last minute groom before heading home after a few days in Barcelona. The owner was so accommodating and we just love how well groomed Bailey was when they were done. Thank you so much! Lots of love, Bailey & family.

¡Mi perrito Río (Spitz Alemán) quedó precioso después de su baño! ✨ Súper limpio, suavecito y con un olor delicioso. Se nota que lo trataron con mucho cariño y cuidado. ¡Gracias de verdad! Sin duda volveremos

Excelente! Hemos llevado un gatito a deslanar, (tipo bosque de noruega) que es muy bueno pero muy muy asustadizo. En casa, del miedo que le da todo el imposible cepillarle y le da muchísima ansiedad. Da gusto ver profesionales de verdad que entienden y se preocupan por los animales. Ha sido nuestra primera vez y ya tenemos sitio de confianza. Es difícil encontrar peluquerías competentes y más aún para felinos, 100% recomendable

Hoy he llevado a mis 2 perros y la experiencia ha sido MARAVILLOSA He pasado por allí para ver cuando podía llevarlos y me los han cogido en el momento La verdad que los 2 profesionales han sido súper atentos y empaticos en todo momento Desde luego han quedado preciosos y son 2 husky ,el trabajo de bañar 2 perros de esa dimensión es de valorar porque menudo currazo dan Muchísimas gracias

Llevé a mi perra a Gus Boral en varias ocasiones, y en las últimas visitas empecé a notar que mostraba un miedo creciente durante todo el camino al local. Esto no me habia sucedidi nunca en otras peluquerias caninas, es una labradora tranquila y mayor. Como me pareció importante que el equipo lo supiera para poder acompañarla mejor, decidí informar de ello, sin ninguna acusación, simplemente como una observación que podía ayudar a entender su estado emocional y a facilitar el trabajo. Lejos de recibir esta información como lo que era —una comunicación útil para el bienestar del animal y para quienes lo cuidan—, recibí un sermón de más de diez minutos por parte de una de las dos personas que atienden el establecimiento. Me dijo que si no estaba tranquila dejando allí a mi perra, que me la llevara, y que todos los perros se ponen nerviosos. Me sentí tratada como si fuera una dueña exagerada o histérica, y se me ofreció quedarme a observar desde el cristal si dudaba de cómo trataban a los animales, lo cual no era en absoluto el caso. Entiendo que cada perro es diferente y que no siempre es sencillo, pero la falta de escucha y sensibilidad hacia las personas tampoco invita a confiar en el trato que puedan tener con los animales. Quiero dejar claro que el trato de una de las personas del equipo ha sido siempre correcto y profesional. Sin embargo, la otra persona mostró una actitud poco empática, poco receptiva y, en mi opinión, inadecuada. Y si alguien trata con tan poco tacto a las personas, es legítimo preguntarse si tendrá la misma falta de sensibilidad con los animales. De hecho lo hemos visto brusco con los perros en más de una ocasión. Al llegar a casa una de las patas estaba sangrando, tiene heridas al lado de las uñas. No escribo esta reseña con ánimo de perjudicar, sino con la intención de que otros tutores de perros puedan tener en cuenta estas vivencias antes de decidir. Si van, pidan que les atienda Gustavo. No volveremos.

No suelo escribir malas críticas. Esta vez lo merece. No son para nada recomendables. Me dieron el perro con la cabeza llena de trasquilones y sangrando las uñas. Jamás he visto nada igual. No vuelvo ni loco, ni cerca de esa puerta.